El contrato fijo discontinuo, cada vez más habitual para muchos trabajadores

 

Los contratos fijos discontinuos se han convertido en la realidad de cada vez más trabajadores, pero aún siguen generando muchas dudas tanto entre estos como en las propias empresas. Por eso, aquí vamos a explicarte qué es exactamente un contrato fijo discontinuo y cuáles son sus características y posibles ventajas tanto para las empresas como para los empleados.

 

Empezando por el principio: ¿qué es el contrato fijo discontinuo?

 

Se trata de una modalidad laboral en la que la empresa contrata a un trabajador durante períodos específicos, pero de manera continuada en el tiempo. Así, el empleado cuenta con un contrato indefinido, pero solo deberá trabajar durante períodos determinados.

No debe confundirse el contrato fijo discontinuo con el contrato temporal. En el primer caso, el empleado tiene asegurado que volverá a trabajar cuando se reanude la actividad; con los contratos temporales, en cambio, la empresa no tiene por qué volver a contratar a la persona en cuestión.

 

¿En qué tipo de trabajos son más habituales los contratos fijos discontinuos?

 

El contrato fijo discontinuo se ve con frecuencia en aquellos trabajos que, por sus características, solo requieren que los empleados desarrollen su actividad durante períodos determinados del año. Ejemplos de estos trabajos pueden ser los que se desarrollan en colegios y otros centros educativos, en ciertos negocios de hostelería, en el sector de la agricultura etc.

 

¿Por qué pueden resultar interesantes los contratos fijos discontinuos?

 

Este tipo de contratos presentan ventajas claras para las empresas, y también pueden resultar interesantes para muchos trabajadores:

• Las empresas ahorran recursos durante las temporadas de inactividad, y además tienen la seguridad de contar con recursos humanos disponibles, ya formados y de confianza para cuando los necesiten.
• Los empleados pueden buscar otro empleo o cobrar una prestación por desempleo durante las temporadas en las que el contrato fijo discontinuo quede en suspenso. A diferencia de lo que sucede con los contratos temporales -que simplemente concluyen, sin ninguna garantía de renovación-, en este caso los trabajadores saben que volverán a ser contratados cuando llegue una nueva época de actividad.

 

Para saber más sobre el contrato fijo discontinuo

 

Si tienes dudas sobre cómo implementar los contratos fijos discontinuos en tu negocio o sobre qué implican para ti como trabajador, en Serval Nervión te asesoraremos sin ningún compromiso: somos una asesoría en Bilbao compuesta por un equipo de profesionales en cuestiones laborales, fiscales, contables y mercantiles.

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